El criminólogo Ricardo Sosa a través de una entrevista televisiva, aseguró que ningún expresidente de la república tuvo la valentía que tiene el actual presidente, Nayib Bukele, para poder combatir a los grupos terroristas que por muchos años mantuvieron aterrorizada a la población salvadoreña.
Además, destacó las actuales medidas de seguridad que se han implementado para salvaguardar la vida de cada salvadoreño.
«Ningún presidente había tenido la voluntad política ni la valentía de enfrentar a las pandillas como se está haciendo en este momento por parte del gabinete de seguridad, en el unen esfuerzos la Policía Nacional Civil, la Fuerza Armada y la fiscalía general de la República», expresó Ricardo Sosa en la Entrevista de Canal 10.
Las pandillas son responsables de la mayoría de los delitos graves que se cometen en el país, como homicidios, desaparición de personas, extorsiones, amenazas y hasta desplazamientos forzados de familias.
El criminólogo tildó de cobardes a los exgobernantes por la actitud desinteresada y pasiva que mostraron para combatir a las pandillas y el crimen organizado, eso causo que el problema fuera creciendo cada vez más.
«Debo decirlo con propiedad, y aunque algunas personas les moleste, pero desde el expresidente Alfredo Félix Cristiani hasta Salvador Sánchez Cerén fueron cobardes contra las pandillas, le tuvieron miedo al crimen organizado, tuvieron miedo accionar con estrategia e inteligencia el combate frontal que está permitido por nuestra Constitución y por las leyes de la república», afirmó Sosa.
La fuerte crítica también les era para los estrategas de seguridad de los gobiernos anteriores, así como los asesores de los partidos ARENA y FMLN que «fueron cobardes y no pudieron recomendar al presidente de ese momento que tenía que hacer un combate frontal y efectivo», dijo.
Sosa también, menciono que los gobiernos pasados no pudieron enfrentar, con capacidad técnica, el avance de las pandillas y ese mismo comportamiento los llevó a mejor pactar con ellos para llegar a «una negociación en la cual se establecía una cuota de poder político a través de voto de estas estructuras y sus colaboradores».
Para finalizar dijo que a los gobiernos «No les importaba que las pandillas y el crimen organizado masacraran a la población y atentaran contra la vida de los salvadoreños, a cambio de corrupción e impunidad que se les otorgó a las pandillas y al crimen organizado en un Estado libre para operar».