«Bonnie», lo que era una tormeta tropical que ya había estado llevando fuertes lluvias, inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra a algunos países, es ahora un huracán con vientos de 130 kilómetros por hora y ráfagas de viento más altas, según detalló el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
En este sentido, Protección Civil declaró alerta roja en 42 municipios y naranja en el resto del país debido a que Bonnie, que ya ha dejado graves afectaciones en El Salvador, seguirá influenciando de forma indirecta al país. Por ello, las autoridades han recomendado a la población a estar atentos ante posibles afectaciones causadas por las fuertes lluvias con probabilidad de crecientes súbitas, inundaciones y deslizamientos de tierra.
Sobre las lluvias de ayer, el ministro de Medioambiente y Recursos Naturales, Fernando López, dijo que «en el gran San Salvador recibimos más de 100 milímetros de lluvia» y explicó que eso equivale al 5% del promedio anual de lluvia que cae en El Salvador.
Bonnie, el tercer huracán de la temporada 2022 en el Pacífico nororiental, tocó tierra el 1 de julio como tormenta tropical en la costa del mar Caribe cerca de la frontera entre Nicaragua y Costa Rica, provocando fuertes lluvias en toda la región y al siguiente día cruzó al océano Pacífico.
Las inundaciones provocaron la muerte de una persona en El Salvador y la evacuación de miles de personas en territorio nicaragüense y costarricense.