El pastor Mario Vega nuevamente demuestra que esta intentando a cómo de lugar defender los derechos de los delincuentes; ya que para este señor también es un gran negocio los altos índices de delincuencia que antes habían en El Salvador.
Sin duda alguna una muestra de que están trabajando para beneficio de los delincuentes y no del pueblo; el régimen de excepción se ha convertido en una bendición para los salvadoreños que ahora disfrutan de un país seguro.
Los restaurantes, los centros comerciales, los lugares nocturnos han aumentado en sus ingresos porque están recibiendo más visitas de los salvadoreños; este pastor es una vergüenza para la verdadera comunidad cristiana en El Salvador.