El presidente de Tesla, Elon Musk, se enfadó esta semana con el presidente estadounidense, Joe Biden, por haber citado en su discurso del estado de la Unión a las dos mayores empresas automovilísticas del país, Ford y General Motors, pero no la suya.
La «ofensa» se produjo cuando el mandatario norteamericano se refirió a la revitalización del sector manufacturero estadounidense, uno de los principales puntos de su programa de gobierno, y señaló que «las compañías están eligiendo construir nuevas fábricas aquí cuando sólo hace unos años lo habrían hecho en el extranjero».
Por su parte, Biden aplaudió los esfuerzos por el cambio a energías limpias: «Ford está invirtiendo 11 mil millones de dólares para construir vehículos eléctricos, creando 11 mil empleos en todo el país». Además, calificó como histórica la inversión de GM: «7 mil millones de dólares para construir vehículos eléctricos, creando 4,000 empleos en Michigan».
No obstante, tales logros no fueron bien recibidos por Elon Musk; por lo que recurrió a su red social favorita, Twitter, para contestar directamente a la cuenta del presidente estadounidense, que había tuiteado la mención en el discurso a los dos fabricantes de automóviles. Musk aseguró que su empresa también crea empleos y, además, supera por mucho a las inversiones de sus rivales. «Tesla ha creado más de 50 mil empleos en EE. UU. vehículos eléctricos y está invirtiendo más del doble de GM y Ford construyendo combinados», manifestó.