El 6 de junio de 2015 Leo Messi ganaba con el FC Barcelona la Liga de Campeones en el Estadio Olímpico de Berlín a la Juventus de Turín (3-1) gracias a los goles de Rakitic, Luis Suárez y Neymar, que hicieron inútil el de Álvaro Morata. Desde entonces, son ocho ya las ediciones en las que la pulga no consigue levantar el trofeo, ni con el club de sus amores, el Barça ni con el PSG.
De 2006, año en que Messi debutó como profesional, a 2015, año en el que ganó la Champions por última vez, Lionel acumuló cuatro orejonas ganadas, la de 2006 en donde Barcelona venció a Arsenal, luego en 2009 y 2011, en donde los culés vencieron al Manchester United y por último, la de 2015 en donde derrotaron a la Juventus.
Parecía que Messi amaba jugar en la Champions como nadie, sin embargo, durante ocho años ha sufrido decepción tras decepción y hoy ya parece costumbre ver al exjugador del Barcelona con su cara de tristeza.