Los países de la Unión Europea acordaron tras una maratoniana jornada que se prolongó hasta la madrugada de este miércoles que los nuevos coches que se vendan en la UE a partir de 2035 deberán ser libres de emisiones de CO2 y, por lo tanto, neutros para el clima.
El Consejo de la UE, tiene como objetivo la reducción de emisiones para 2030 del 55% para los automóviles y del 50% para las furgonetas, para llegar a los vehículos de cero emisiones en 2035.
Ante la presión de Alemania, el primer fabricante y mayor mercado automovilístico de la UE, con el apoyo de Italia, la Comisión preparará una propuesta para que a partir de 2035 se puedan matricular aún vehículos que utilicen combustibles sintéticos de cero emisiones contaminantes.
Asimismo, en 2026 se estudiará el avance logrado por los híbridos enchufables, pues si siguen avanzando en lo que autonomía eléctrica se refiere, podrían ser validados de alguna manera.
«Algunos fabricantes mantienen que los híbridos podrán llegar a lo que se necesita. Por ahora no lo hacen, pero si lo llegaran a hacer, lo reevaluaremos en 2026», dijo Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europea.
La fecha de 2035, pese a no ser aún oficial, se alinea con la que defienden el Parlamento Europeo y la Comisión Europea, con quienes los países tendrán que negociar la normativa definitiva.